La granjera que frenó una central hidroeléctrica
No duda cuando le preguntan qué hace. “Soy pastora y esquiladora”. Pero la islandesa Heiða Guðný Ásgeirsdóttir, de 43 años, es muchas cosas más. En su niñez se consideraba un patito feo, delgada, bajita y desgarbada. Como en el cuento, su aspecto cambió radicalmente. Lo que nunca cambió fue su carácter volcánico y rebelde. “Una granjera … La granjera que frenó una central hidroeléctrica