El hombre corzo

Geoffroy Delorme: Apuntes para sobrevivir en el bosque como un corzo

Desde que era niño, Geoffroy Delorme sintió que su lugar no estaba en la civilización, sino en la naturaleza. Comenzó a internarse en ella a través de pequeñas incursiones en el bosque que tenía en frente de su casa, un lugar que parecía reclamarlo. Unas expediciones que evolucionaron hasta convertirse en su modo de vida durante siete Geoffroy Delorme: Apuntes para sobrevivir en el bosque como un corzo

Delorme: “Yo le rogaba a dios que me convirtiera en un zorro”

Sentir De niño se escapaba de noche por la ventana para adentrarse en el bosque, donde sesentía libre y autónomo y más acompañado que entre humanos. A los 19 años decidió quedarse avivir en el bosque como un animal más y acabó siendo aceptado por los corzos. “Esa confianzaabsoluta que me concedieron me conmovió profundamente”. Delorme: “Yo le rogaba a dios que me convirtiera en un zorro”

Hermano corzo

Es este un libro del que si un día nos dicen que es todo mentira no dudaríamos en aceptarlo al momento. De tan insólita, intempestiva, áspera, que resulta la peripecia del autor, que un día decide irse de su casa para vivir en los bosques, del mismo modo en que viven los animales que habitan Hermano corzo

El hombre que vivió siete años entre corzos

Desde siempre, el ser humano ha sentido la necesidad de conectar con su lado salvaje. Filósofos, artistas o meros anacoretas, ermitaños o misántropos lo dejaron todo para irse a vivir a la naturaleza más recóndita. De Paul Gauguin a Henry David Thoreau, pasando por Timothy Treadwell o Christopher McCandless, cuyas epopeyas de trágico final inspiraron El hombre que vivió siete años entre corzos

Geoffroy Delorme, fotógrafo y escritor: “Vivir siete años en un bosque me enseñó a ser humano”

A Geoffroy Delorme (Francia, 1985) nunca le ha asustado la soledad. Educado en casa, pasaba los días en su habitación, contemplando desde su ventana el bosque de Louviers, en Normandía. Un día decidió adentrarse en él y allí vivió durante 7 años–de los 19 a los 26–, donde una familia de corzos le acogió como Geoffroy Delorme, fotógrafo y escritor: “Vivir siete años en un bosque me enseñó a ser humano”

Amados corzos

Siete años entre corzos, viviendo casi como un animal salvaje en un bosque de Normandía. El naturalista francés Geoffroy Delorme (37) ha documentado su larga y extraña experiencia de ecologismo inmersivo en ‘El hombre corzo’ (Capitán Swing), un libro en el que relata su convivencia con estos pequeños cérvidos y su conexión profunda con la naturaleza. Dando Amados corzos

Geoffroy Delorme, el ‘hombre corzo’ al que vivir siete años en el bosque le enseñó a ser humano

La soledad nunca ha incomodado al fotógrafo Geoffroy Delorme (Francia, 1985). Ya en el colegio sentía que no encajaba, así que abandonó la escuela a los 7 años y estudió primaria, secundaria y bachillerato por correspondencia. Pasaba los días en su habitación, contemplando desde su ventana el bosque de Louviers, en Normandía. Un día decidió dejar de ser un Geoffroy Delorme, el ‘hombre corzo’ al que vivir siete años en el bosque le enseñó a ser humano

‘El hombre corzo’, siete años viviendo en el bosque

Esta es la extraordinaria aventura de la relación de un hombre con un corzo. La narración se desarrolla en el suntuoso bosque nacional de Louviers, Normandía. Cuenta la historia de Geoffroy Delorme, un consumado fotógrafo, conferencista y amante de la naturaleza, cuyo encuentro casual con un joven corzo en su juventud cambia su vida, tanto ‘El hombre corzo’, siete años viviendo en el bosque

Geoffroy Delorme, el ‘Hombre corzo’: “Los ciervos son el reflejo del alma”

Como la etóloga británica Jane Goodall tuvo a los chimpancés y la estadounidense Dian Fossey, a los gorilas, el fotógrafo francés Geoffroy Delorme encontró a su «verdadera familia» en la vida salvaje, cuando convivió con ciervos siete años en un bosque de Normandía. Para Delorme, los cérvidos son «el reflejo del alma», pero no «una Geoffroy Delorme, el ‘Hombre corzo’: “Los ciervos son el reflejo del alma”

“Convivir con corzos me ha demostrado hasta qué punto soy humano”

El francés Geoffroy Delorme convivió durante siete años con un grupo de corzos en un bosque deNormandía, uno de ellos de forma completa. Quería fundirse con la naturaleza. Ahora publica unlibro contando su experiencia Geoffroy Delorme (Normando, nacido en Nanterre, 37 años) tiene una historia que contar. Y es elresultado de una infancia en soledad, “Convivir con corzos me ha demostrado hasta qué punto soy humano”

El hombre corzo

Desde muy joven, Geoffroy Delorme tuvo dificultades para relacionarse con sus semejantes. Sus padres decidieron sacarlo de la escuela y el pequeño continuó sus estudios en casa. Pero no muy lejos de esta había un bosque que no dejaba de llamarlo. A los diecinueve años, no pudo resistir más la tentación y se lanzó a El hombre corzo