Peter C.Gøtzsche es un médico danés de 71 años que ha pasado su vida poniendo en apuros a la ciencia, o más bien a sus portavoces en la Tierra : industria farmacéutica, organizaciones como la EMA o la OMS, organizaciones de médicos… Este profesor en la Universidad de Copenhague ayudó a fundar en los años noventa la Colaboración Cochrane, una organización dedicada a la revisión y el meta-análisis de estudios científicos, y en particular Gøtzsche se centró en aquellos referidos a terapias o fármacos, aprobados en muchos casos sin un aval real en la supervivencia de los pacientes.
Hace dos años, la junta directiva de la Cochrane votó a favor de su expulsión después de que el danés cuestionara su credibilidad e independencia de la industria a la que debían vigilar. Los títulos de las traducciones al español de sus libros resumen bien el estilo de
Gøtzsche . Tras ‘Medicinas que matan y crimen organizado: cómo las grandes farmacéuticas han corrompido el sistema de salud’, ‘Psicofármacos que matan y denegación organizada’ o ‘Cómo sobrevivir en un mundo sobremedicado‘, ahora la editorial Capitán Swing rescata para nuestro
idioma su última entrega , ‘ Vacunas: verdades, mentiras y controversias ‘, donde se despacha a gusto con vacunas como las del sarampión, la de la tuberculosis, gripe o, para qué irnos más lejos,
las del último coronavirus SARS-CoV-2. Su composición, la validez científica de los ensayos clínicos, las atenuadas contra las inactivadas o las dudas sobre su obligatoriedad.
La UE publica el contrato ‘censurado’ de la vacuna y pide inmunizar al 70% en verano Nacho Alarcón. Bruselas Pese a lo que pueda parecer en este mundo de blancos y negros, el libro del médico danés no es una crítica a las vacunas . Se podría definir más bien como el estallido de una granada de
fragmentación en mitad del debate. La metralla cae indistintamente sobre los que ustedconsideraba buenos y los que veía como malos, le cae al «repugnante fraude» de Andrew Wakefield, el médico que le coló un ‘paper’ a ‘The Lancet’ que relacionaba las vacunas con el autismo, le cae a la OMS, por recomendar el Tamiflu para tratar la gripe A en 2009, o a los CDC
estadounidenses, por enviar mensajes engañosos. Le cae a la EMA, por su evaluación de la vacuna del papilomavirus humano (PVH) o por sus conflictos de intereses, les cae a los antivacunas y las organizaciones provacunas . PREGUNTA. Después de muchos años criticando
a las grandes farmacéuticas, a las agencias de medicamentos o a la OMS, se encuentra de
repente con esta especie de test de estrés extremo para todas.
¿Le han sorprendido positivamente en algún momento o esta pandemia ha refrendado todo lo que escribió sobre ellas?
R. Siga el dinero. Las cosas no cambiarán mientras sea rentable cometer crimen organizado, que es lo que hace la industria, y los reguladores le permitan salirse con la suya. La pandemia no ha cambiado el funcionamiento de todo el sistema.
P. En su libro, habla a menudo de conflictos de interés entre todas estas partes, ¿cuáles le han llamado más la atención durante esta pandemia?
R. En el Reino Unido, por ejemplo, se ha descubierto una gran cantidad de corrupción relacionada con el covid-19. Escribo sobre esto en un capítulo actualizado sobre coronavirus que pronto aparecerá en la versión inglesa de mi libro. La corrupción es tan masiva que se parece más a Rusia que a un país europeo. El editor ejecutivo del BMJ escribió un editorial mordaz en
noviembre explicando cómo el covid-19 ha desatado la corrupción estatal a gran escala, donde los
políticos están reprimiendo la ciencia para obtener ganancias políticas y financieras, y donde
también la industria, los científicos y los expertos en salud han contribuido a la malversación
oportunista. «En Reino Unido la corrupción relacionada con covid-19 es tan masiva que se parece
más a Rusia que a un país europeo» También se ha abusado de la pandemia con fines políticos
para adquirir más poder y aumentar las posibilidades de ser reelegido. Nuestros derechos
humanos básicos han sido violados en el proceso. Es un camino peligroso para nuestras
democracias, cuando el Estado sabe más que nadie y viola los derechos humanos. La historia ha
demostrado que los líderes que nos aseguran que la situación es tan grave que debemos
renunciar a nuestra libertad o principios éticos, o ambos, para ganar seguridad frente a un peligro
externo o interno, por lo general no terminan dándonos ni libertad ni seguridad sino a ellos mismos
el poder absoluto. P. Las autoridades alegan que desarrollar estas vacunas en un tiempo récord
ha sido posible por la gran cantidad de voluntarios que han encontrado para los ensayos clínicos,
no porque se hayan saltado pasos. ¿Cree que su forma de proceder estaba justificada por la
urgencia o se podrían haber hecho mejor algunas cosas? R. Los estándares científicos se han
reducido y las empresas no pueden ser demandadas por los pacientes perjudicados por las
vacunas. Muchas personas están preocupadas por esto y solo dos tercios son proclives a
vacunarse . No sabemos absolutamente nada sobre los daños a largo plazo de las vacunas.
Tampoco sabemos si las vacunas bajarán la mortalidad, pero lo considero muy probable. Espero
que pronto recuperemos nuestras vidas robadas. No es correcto que no se hayan saltado ningún
paso. Si fuera correcto, los reguladores de medicamentos habrían dado la aprobación total a las
vacunas, pero solo las han aprobado para uso de emergencia . Vi esta broma en una lista de
correo electrónico en la que estoy: Ratón 1: ¿Recibirás la nueva vacuna contra el coronavirus?
Ratón 2: ¿Estás loco? Ni siquiera han terminado de probarla en humanos. Por qué aún hay pocas
vacunas para el covid: se fabrican más rápido, pero no es suficiente José Pichel P. Las revistas
científicas y médicas han tenido un año complicado. Superados por servidores de ‘preprints’,
engañados por personas con datos erróneos como ‘Surgisphere’ y ‘The Lancet’… y también
utilizados por las empresas farmacéuticas para compartir información sobre el progreso de sus
vacunas, probablemente tratando de afectar los procesos regulatorios a su favor. Todavía
necesitamos publicaciones como JAMA o NEJM, ¿pero qué debería cambiar para que sigan
siendo útiles, poderosas e independientes? R. La revisión por pares es un arma de doble filo. Los
revisores anónimos a menudo abusan de su anonimato para convencer a los editores, que a
menudo solo leen las revisiones por pares y no el artículo enviado, de que deben rechazar el
artículo. De esta manera, la investigación innovadora que amenaza los intereses financieros,
académicos o gremiales a menudo es difícil de publicar en las principales revistas. Además, las
principales revistas a menudo son demasiado poco críticas con los ensayos patrocinados por la
gran industria, que pueden generar enormes ingresos a través de anuncios y ventas de
reimpresiones. No son ‘independientes’. Por lo tanto, acojo con gran satisfacción la nueva tradición
de subir investigaciones importantes a un sitio web para que todos puedan verlas y criticarlas,
abiertamente, revelando quiénes son. La revisión por pares nunca debe ser anónima. Las caras de
los verdugos también se mantienen en la oscuridad. Ximo Puig abre el debate de la meritocracia
en el reparto de vacunas a las autonomías Víctor Romero. Valencia Unidad de Datos P. El
escrutinio del proceso por parte del público también ha sido mayor que en otras circunstancias, lo
que ha obligado a algunas empresas como AstraZeneca o Pfizer a explicar muchas cosas. En
otros casos, apenas comunicaban durante el proceso de gestión de un medicamento. ¿Cree que
estas prácticas se mantendrán en el futuro? R. Necesitamos mucha más transparencia , incluido el
acceso a los datos que posee la industria para que podamos hacer nuestros propios análisis. P.
Aparte de sus efectos a largo plazo, dado que es demasiado pronto para decirlo, ¿qué otras cosas
cree que nunca sabremos sobre las vacunas covid-19? R. Solo podemos esperar que, si surgen
algunos daños desagradables, los detectemos. Pasaron muchos años antes de descubrir que una
vacuna contra la influenza, Pandemrix, causaba narcolepsia , que es una enfermedad grave de
por vida para la que no hay tratamiento. Necesitamos averiguar si la vacunación reduce las tasas
de transmisión y cuánto tiempo durará el efecto protector. Podría ser de corta duración. Las
mediciones en serie de 452 trabajadores sanitarios infectados demostraron que los niveles de
anticuerpos aumentaron hasta un pico 24 días después de la primera prueba de PCR positiva,
tenía una vida media estimada de solo 85 días y un tiempo medio estimado hasta la pérdida de los
anticuerpos de 166 días. «Necesitamos averiguar si la vacunación reduce las tasas de transmisión
y cuánto tiempo durará el efecto protector. Podría ser de corta duración» La durabilidad es similar
a la de los coronavirus estacionales, donde la reinfección puede ocurrir en un año, y es mucho
más corta que la de los coronavirus que causan el SARS y el MERS, donde la mayoría de los
estudios a largo plazo han encontrado anticuerpos hasta entre uno y tres años después. Aunque
las respuestas innatas y celulares contribuyen de manera importante a conferir inmunidad, estos
resultados son preocupantes. P. Son tiempos muy complicados para el debate abierto sobre este
tema. Usted mismo ha visto cómo, por defender la ciencia, su discurso puede ser usado por los
antivacunas, que precisamente buscan socavar su autoridad. ¿Cómo está afectando esta
polarización a la hora de transmitir sus mensajes? R. Es muy difícil debatir las vacunas de forma
racional. Le digo a la gente lo que dice la ciencia, es lo que siempre he hecho. No me preocupan
las posibles repercusiones. Si los científicos tienen miedo de hablar, estamos en una situación
muy mala. Los científicos tienen el deber de hablar. Cuando se suprime la buena ciencia, la gente
muere. Y cuando se usan etiquetas despectivas, la conversación racional muere. Según
Merriam-Webster, que se autodenomina «el diccionario más útil y respetado de Estados Unidos»,
la Unesco parece ser una agencia contra las vacunas porque se opone al tratamiento sin
consentimiento informado. Un antivacunas es «una persona que se opone a la vacunación o a las
leyes que exigen la vacunación». Calcula cuándo te tocará vacunarte (si no se te adelanta un
político) José Rodríguez Sojo P. Uno de los mensajes que usted manda y sí ha calado entre los
mandatarios de todo el mundo es que las vacunas para covid-19 no pueden ser obligatorias para
así no alimentar la desconfianza hacia ellas. R. ¿Le sorprendió esto? Actualmente, existen
vacunas obligatorias en muchos países, no solo en los EEUU, sino también en algunos países
europeos. P. En su libro, critica que «si dejamos la vacuna en manos de compañías farmacéuticas,
lo más seguro es que se venda a un precio que muchos países no podrán permitirse». Sin
embargo, hay ejemplos como el de AstraZeneca, que venderá su vacuna sin ánimo de lucro, o el
de otras que han ofrecido licencias a la India. R. La Universidad de Oxford lo intentó por primera
vez con Merck, una empresa estadounidense, pero no funcionó, y llegaron a un acuerdo con
AstraZeneca, una empresa del Reino Unido. Su vacuna es la más barata . Me complace que se
hayan ofrecido licencias especiales. Los medicamentos no deben patentarse en absoluto:
deberían ser un bien común. Cuando Pfizer anunció que su vacuna era muy eficaz, las acciones
mundiales se dispararon y el director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, vendió 5,6 millones de
dólares en acciones a un paso del máximo histórico de la compañía. Si Bourla hubiera vendido sus
acciones un día antes del comunicado de prensa, habría ganado 800.000 dólares menos. El
director ejecutivo de Moderna, Stéphane Bancel, vendió la friolera de 49,8 millones de dólares en
acciones de la empresa. «La Comisión ha adoptado este argumento de mierda de la industria
farmacéutica, que prefiere que todo sea ultrasecreto» No es de extrañar que las vacunas y otros
medicamentos sean tan caros. Pero la Comisión Europea mantuvo en secreto los precios de las
vacunas con la excusa poco convincente de que debilitaría la posición de la UE en futuras
negociaciones. La Comisión ha adoptado este argumento de mierda directamente de la industria
farmacéutica, que prefiere que todo sea ultrasecreto. Si no fuera así, habría mucha menos
corrupción. Una ministra belga tuiteó los precios como parte de un debate sobre los gastos del
Gobierno, pero su tuit fue eliminado a la velocidad de la luz. Pfizer fue la primera empresa en
criticarla, pero gracias a su coraje, sabemos cuáles eran los precios de una dosis de las vacunas:
P. Me interesa su visión sobre el límite entre ciencia y política. Muchas medidas se han tomado
por parte de los gobiernos aludiendo a un supuesto «conocimiento científico», pero no hay
evidencias sólidas sobre cómo combatir una epidemia. ¿Se han aprovechado muchos políticos del
prestigio de la ciencia o son los científicos también culpables por haber querido llegar a un sitio
desconocido? R. Esta es una pregunta complicada. Algunos científicos han abusado de su
posición y algunos políticos han hecho lo mismo, ignorando la ciencia que no les gustaba. P.
Muchas de las medidas que se han tomado parecen absurdas, como por ejemplo tener que llevar
mascarillas al caminar solos por el monte, pero ahí siguen vigentes. ¿De cuáles cree que nos
arrepentiremos más una vez la pandemia haya terminado? R. Los confinamientos draconianos ,
porque parecen haber causado más daño que bien en el mundo. Se ha estimado que los
encierros, la falta de personal y el miedo a infectarse provocaron un aumento de la mortalidad
materna e infantil en los países de ingresos bajos y medianos, hasta el punto de que ya se han
perdido cientos de miles o quizás incluso millones de vidas. Aquí no estamos hablando de ganar
algunos años de vida en el extremo superior del espectro de la vida, sino de la pérdida de vidas
desde el comienzo, el parto y la muerte de decenas de miles de madres jóvenes. Los encierros
también matan por pobreza. En octubre, el Banco Mundial estimó que la pandemia de coronavirus
había provocado un aumento de alrededor de 100 millones de personas que vivían en la pobreza
extrema. Después de que India introdujera un confinamiento, los trabajadores migrantes temían
que el hambre los matara antes de que lo hiciera el coronavirus. «Estimo que cuesta ocho millones
de euros alargar la vida de una persona de 82 años gracias a las medidas draconianas contra el
virus» Por tanto, mi estimación superficial de un coste de ocho millones de euros por persona de
82 años cuya vida se alarga gracias a nuestras draconianas medidas contra el coronavirus es
probablemente demasiado optimista. Mirando el mundo entero, me parece probable que hayamos
perdido muchos más años de vida de los que hemos ganado. Los ensayos aleatorios no han
encontrado un efecto de las mascarillas faciales. Una revisión sistemática, actualizada en 2020, no
encontró que el uso de mascarillas redujera la aparición de enfermedades similares a la influenza
(el índice de riesgo () es de 0,99 -0,82 a 1,18- con 3.507 participantes). Si se agregan los resultados del ensayo danés en un metanálisis, el cociente de riesgo baja hasta 0,96 -0,81 a 1,13- o casi lo mismo. Esto no da mucha esperanza. En segundo lugar, las mascarillas faciales causan daño. Son incómodas de llevar, pueden causar una picazón muy irritante en la nariz y espinillas, pueden causar problemas de visión si se usan gafas y hace frío. También pueden dar a los usuarios una falsa sensación de seguridad para que se acerquen demasiado a otros clientes en las tiendas. A diferencia de las mascarillas, mantener la distancia funciona : si las personas no se acercan, no se infectan.
No deberíamos obligar a poblaciones enteras a parecer ladrones de bancos durante meses o años cuando la ciencia indica que no funcionan. Además, no hay lógica en los requisitos. En Dinamarca, los niños menores de 12 años no necesitan usar máscaras faciales, aunque este grupo de edad probablemente propague más infecciones que otros. Finalmente, no he conocido a una sola persona que utilice correctamente las mascarillas. La gente usa la misma mascarilla una y otra vez, a veces durante semanas. De acuerdo con las pautas, ni siquiera está permitido guardarla temporalmente en el bolsillo para reutilizarla en la próxima tienda durante su ruta de compras. Muy pocas personas lo saben. Las mascarillas se han convertido en un símbolo de pertenencia a la multitud, de sentirse bien, en lugar de una ayuda. () El índice de riesgo o riesgo relativo es, en este caso, la posibilidad de adquirir el virus llevando mascarillas. El indicador, habitual en publicaciones científicas, viene a decir que si es menor a 1 resulta un factor protector, si es igual a 1 no afecta a las posibilidades de contagio y si es superior a 1 puede incluso incrementar estas posibilidades.
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