Florencia Insurgente

Por ABC de las Letras  ·  21.02.2009

Florencia insurgente está constituida por los libros II y III de Historia de Florencia (Istorie fiorentine), de Nicolás Maquiavelo (1469-1527), obra publicada póstumamente, en ocho libros, en 1532, y escrita entre 1523 y 1525. Como se sabe, le fue encargada al autor de El príncipe por el cardenal Julio de Médicis (luego Clemente VII).

Maquiavelo traza en el primer libro una visón general desde la caída del Imperio romano hasta 1434, fecha en la que regresa a Florencia Cosme de Médicis. Los dos libros ahora editados tratan de la historia interna de Florencia hasta 1422, y la historia completa alcanza el año 1492 (muerte de Lorenzo el Magnífico).

Los editores han utilizado la misma traducción (excelente) de Félix Fernández Murga, publicada por «Clásicos Alfaguara» hace treinta años. También han usado, suprimiendo algunos párrafos, la parte del prólogo de Fernández Murga de la misma edición que corresponde a lo editado. Se completa la obra con un extenso y documentado epílogo de Gene A. Brucker sobre la famosa revuelta de los ciompi (del gremio textil), tema que ocupa el libro III, y cuyo texto ha sido extraído de la Florentine studies (1968).

La intención de Capitán Swing, que inaugura con este volumen la editorial, es incitar a los lectores del presente a inspirarse en Maquiavelo, y en especial en estos capítulos, para liberarnos de los abusos actuales. No deja de ser curiosa su lectura, sobre todo si se aprecia que esta obra se acabó de imprimir, como afirman los editores, el «décimo aniversario de la elección de Hugo Chávez como presidente de la República Bolivariana de Venezuela». (Mejor olvidemos la sugerencia)

Sabido es que la Historia de Florencia forma parte de la Historia pero es historiográficamente un texto menor, especialmente porque Nicolás Maquiavelo no tuvo ningún problema en falsificar u olvidar hechos con el fin de contribuir a sus ideas políticas. Se le ha criticado -sin que merme la importancia de sus lúcidas observaciones- que no verificó suficientemente los datos.

Los determinante, sin embargo, es la intuición de Maquiavelo -a diferencia de historiadores florentinos anteriores, como Leonardo Bruni de Arezzo o Poggío Bracciolini- de cretrarse en los conflictos civiles de Florencia.

Lectura, pues, de una Florencia rica y controvertida, divida por poderes encontrados y corrupciones notables. Esta obra anotada para entender mejor a Nicolás Maquiavilo como historiador.

Juan Malpartida

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