Pocas personas son brillantes en todo lo que hacen. Fernando Fernán Gómez fue una de ellas. Un gigante de la cultura en mayúsculas. Un artista total. Actor, director de cine, de teatro, guionista, escritor, académico de la lengua española, gran conversador… su talento era único. También un mal carácter que cultivó para espantar a la gente que le daba la lata, como aquel famoso “¡Váyase usted a la mierda!” que le espetó a un admirador pesado al que no quiso firmarle un autógrafo.
Él mismo se definía como “un tímido con mal carácter”, pero por encima de todo “un cómico”. Y es que llevaba la profesión en las venas. Hijo único de la actriz de teatro Carola Fernán Gómez y nieto de la gran María Guerrero, nació en Lima el 28 de agosto de 1921 mientras su madre estaba de gira y a los tres años el pequeño Fernando se vino a Madrid, a cargo de su abuela materna, una mujer socialista y republicana que le inculcó la conciencia obrera. javascript:falsePUBLICIDAD
Padeció la guerra y una posguerra aún más dura. Estudió Filosofía y letras, pero lo suyo era “contar historias” y se dejó seducir por las tablas. Recibió clases en la escuela de actores de la CNT y en los años 40 fue descubierto por el escritor Jardiel Poncela en Eloísa está debajo de un almendro Ya nada pudo escapar a su ímpetu creador .
La Filmoteca le dedica un amplio ciclo y FlixOlé una selección de sus mejores títulos y material inédito
Este próximo sábado hubiera alcanzado el siglo de vida. Un cáncer de colon le obligó a plantarse a los 86 el 21 de noviembre de 2007 en el hospital de La Paz de Madrid. Hasta entonces este hombre de mirada y voz profundas se había mantenido al pie del cañón. Sus últimas apariciones las regaló en la comedia romántica Mia Sarah y en el estupendo documental conversación La silla de Fernando donde charlaba de cualquier tema ante la cámara de David Trueba y Luis Alegre. En más de seis décadas de carrera, el pelirrojo cascarrabias actuó en más de 200 películas, dirigió una treintena, escribió 36 guiones para cine y televisión, 13 novelas, 12 obras de teatro, y una decena de libros, además de artículos y conferencias. No está nada mal para alguien que decía sin tapujos que “estaba capacitado para no hacer nada”.
Falleció a los 86 años en 2007 a causa de un cáncer de colon
Admirado por el público y la crítica, fue distinguido con el premio Príncipe de Asturias de las Artes, los Nacionales de Cine y Teatro, la Medalla de Oro de la Academia de Cine y seis Goyas, dos de ellos como mejor actor por sus extraordinarios trabajos en El abuelo y Mambrú se fue a la guerra y como secundario por su Manolo en la oscarizada Belle Époque de Fernando Trueba. El festival de cine de Berlín le honró con dos Osos de Plata al mejor actor y en 2005 le otorgó uno honorífico por toda su carrera. El de San Sebastián le galardonó con el Donostia a toda su trayectoria en 1999. Pero a él no le gustaban las entregas de premios ni las entrevistas.
La efeméride de su centenario coincide con el año Berlanga, director con el que trabajó en Esa pareja feliz (1951), debut del valenciano junto a Juan Antonio Bardem en torno a la vida cotidiana y las aspiraciones de un matrimonio. También en Moros y cristianos , comedia menor de Berlanga, que se puede ver actualmente en las salas. Entre los homenajes dedicados a su figura, la Filmoteca Española lleva desde enero con el ciclo Los 100 de Fernando Fernán Gómez y cuenta con una sesión especial el sábado 28. El canal temático de AMC Networks Somos, especializado en cine español, le dedica el día del centenario una programación con una docena de sus obras, así como TCM ofrece la versión remasterizada de ‘La silla de Fernando’.
Sus novelas La Puerta del Sol o El viaje a ninguna parte, sus obras de teatro, como Las bicicletas son para el verano, que Jaime Chávarri trasladó a la gran pantalla, o El pícaro. Aventuras y desventuras de Lucas Maraña, o su libro de memorias, El tiempo amarillo, que la editorial Capitán Swing reedita por su centenario, siguen gozando del favor de los lectores. En 2019 salió Teatro, un volumen que reúne por primera vez todo el teatro de Fernando Fernán Gómez editado por su nieta Helena de Llanos y Manuel Benítez en Galaxia Gutenberg. En octubre se publicará su Diario de Cinecittà (Altamarea ediciones) y Blackie Books trae la antología El libro de Fernando Fernán Gómez .
Fernán Gómez bordó todas las disciplinas que tocó: actor, director, escritor, académico de la lengua, guionista….
FlixOlé, la plataforma de cine español, proyecta sus títulos más emblemáticos como actor: El último caballo , una fábula ecologista de Edgar Neville; El espíritu de la colmena , de Víctor Erice; El anacoreta , de Juan Estelrich, una sarcástica alegoría sobre la incomunicación y la libertad, o su querido maestro Don Gregorio de La lengua de las mariposas, de José Luis Cuerda.
Como director se podrá disfrutar de sus obras de culto: El mundo sigue (1965); El extraño viaje (1964) -estos dos censuradas por la dictadura por su realismo social- o El viaje a ninguna parte (1986).
La plataforma incorpora en exclusiva: Un vampiro para dos , hilarante comedia dirigida por Pedro Lazaga. Y muestra material inédito sobre su filmografía desde el archivo de Mercury Films, como imágenes de escenas descartadas, (el caso del bikini que no apareció en El malvado Carabel); la licencia de exhibición aprobada para La venganza de Don Mendo, y las instrucciones marcadas por la censura para su proyección o el guion original de la película Balarrasa, con correcciones y páginas tachadas. En la página web se pueden leer artículos repletos de curiosidades y anécdotas, incluyendo sus visitas al Café Gijón o sus batallas con la censura. En tiempos de cultura en la cuerda floja, Fernán Gómez es un genio al que toca reivindicar más que nunca.
