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El dandismo, a examen

Por Numerocero  ·  05.11.2012

 

Según la mitología griega, los mirmidones eran unos guerreros que adoptaron el nombre de hormigas. Algunos se preguntarán qué tienen que ver con los dandis, pero si tenemos en cuenta que el dandismo se basa en nadar contracorriente la comparación no es descabellada.

El libro, que se abre con un necesario y acertado prólogo de Luis Antonio de Villena, está coordinado por Leticia García y Carlos Primo, y contiene una serie de relatos, ensayos y cuentos en los que se analiza el fenómeno del dandismo desde el siglo XIX hasta mediados de siglo XX,  en que Tom Wolfe ve en los ‘mods’ los dandis del siglo XX. A través de estos textos, no sólo se analiza el dandismo, a veces de forma crítica, otras con fina ironía y otras incluso en primera persona, sino que se le ubica y disecciona: ser un dandi va más allá de la indumentaria, y al contrario de lo que muchos creen, poco o nada tiene que ver con la mera elegancia, sino que se trata de una subversión de las formas que tiene raíces en el propio pensamiento y forma de entender la vida, como bien señala Francisco Umbral en su texto sobre Larra. Hay quien va más allá, como Albert Camus, y entronca a los dandis con los héroes románticos con quienes se inicia el “culto al personaje”.

Un libro sobre el dandismo no puede obviar a Brummel o Huysmans, y en ‘Prodigiosos mirmidones’ no sólo se recuperan sus figuras, sino que además ofrece nuevas visiones sobre el primero en ese magnífico ‘Beau Brummel’ de Virginia Woolf en el que asistimos a la decadencia y senectud del personaje que representó como nadie el dandismo. Otro de los aciertos del libro es la recuperación de algunos textos españoles sobre el fenómeno, donde lo dandy se da la mano con la leyenda negra al más puro estilo Bécquer, como sucede con el relato de Álvaro Retama.

La lectura de ‘Prodigiosos mirmidones’ es amena, esclarecedora y reivindicativa, pero también deja una pregunta en el aire: ¿existe el dandy en el siglo XXI?

 

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